Una de las últimas investigaciones sobre el tema, procedente de Inglaterra, detalla algo más al respecto: las mujeres no sólo son las que más leen sino las que en un porcentaje mucho más alto devoran los libros. Pertenecen a un tipo de lector que los investigadores han venido a denominar Page turner o Gira páginas, aquel que muestra una gran dificultad para despegarse de la lectura, incluso para dormir. Frente a este tipo, los hombres parecen responder en mayor porcentaje -en un 32% frente al 18% en las mujeres- a la categoría del tipo de lector denominado Slow worm o Gusano lento, de lectura poco ágil, pero comprometida a llegar hasta el final del libro.
La ficción parece seguir compartiendo un importante vínculo con la mujer, la mujer joven de hoy, y es ineludible la pregunta: ¿Por qué?
Empezamos a enterarnos de su vida
llegando a recordar cosas que no habíamos vivido.
Supimos lo que era ser chica
y cómo el serlo te hacía soñar…
(Sofía Coppola, Las Vírgenes suicidas, 1999)
"Slow Worm" no suena del todo bien. En caso de otras estadísticas en las que las mujeres no salgan tan bien paradas, no creo que sentase excesivamente bien la utilización de adjetivos similares... Uyuyuyuyui...
ResponderEliminarEs verdad que no suena bien. Quizá se podría haber escogido otra expresión como... tortuga lenta?... caracol?... uhmmm: creo que ninguno suena bien... especialmente cuando uno no se siente contemplado dentro de los términos de una generalización, en la que no tiene por qué contemplarse... En cuanto al otro punto, tristemente las mujeres hemos salido mal paradas en las estadísticas históricamente, quizá si lo miras desde un contexto de discriminación positiva, sin personalizaciones, pueda resultarte más descriptivo y... menos ofensivo ;)
ResponderEliminarL.P.
Lo de worm no es ningún insulto, se referirá a la expresión inglesa "bookworm" que viene a ser un ratón de biblioteca.
ResponderEliminarY "gira páginas" hace referencia a un lector voraz pero también puede que superficial...
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